En un día como hoy, cada año, durante muchos de ellos, he sentido una tristeza infinita de frustración y desconsuelo por haber sentido la magia de la vida... Y saber que son ángeles en el cielo...
Hoy ha sido distinto, hoy he sentido paz y armonía conmigo misma. No hay melancolía ni añoranzas, no hay dolor ni lágrimas... Hoy siento paz en mi alma y consuelo en mi corazón...
Miro a mi alrededor y pese a la bruma, hay un camino, uno nuevo, puedo llegar, algún día, a sentir un abrazo y un beso de amor verdadero, sin condiciones, un beso limpio, un abrazo puro y la calidez de la mirada de un ser al que podre llamar mi hijo...
Un beso limpio, puro y único...
No hay comentarios:
Publicar un comentario