miércoles, 14 de junio de 2017

PROBLEMAS EN EL UTERO Y SU ORIGEN EMOCIONAL

Los  problemas en el útero más frecuentes son: fibromas, miomas, retroversión, trastornos funcionales, infecciones, tumores y cáncer. Todo dependerá del grado del conflicto emocional.
¿Qué conflicto emocional estoy viviendo?
Si yo presento algún problema en mi útero, significa que estoy viviendo o he vivido relacionado con “casa”. El útero representa mi casa y la casa que yo le quiero dar a mis hijos. Como el útero es el primer lugar en el que habita el futuro bebé, cualquier problema en este órgano se relaciona con el recibimiento, el hogar, la morada o el refugio de alguien. Cuando una mujer no puede dar a luz a causa de un problema en el útero, su cuerpo le dice que en lo más profundo de sí quiere tener un hijo, pero un miedo todavía más grande que su deseo influye hasta el punto de crearle un bloqueo físico que no le permite concebir. También es posible que la mujer que está resentida consigo misma por no haber recibido bien a su hijo, sufra algún problema en esta parte del cuerpo. Por otro lado, toda   mujer que tiene un problema uterino es del tipo a la que le resulta difícil dedicar el tiempo necesario para hacer germinar una idea nueva antes de manifestarla concretamente. Es probable que también presente problemas en el útero la mujer que se siente culpable de no crear un hogar lo bastante bueno para sus seres queridos.
Los problemas en el útero, en la gran mayoría de los casos (80%), están relacionados con historias transgeneracionales en que “ser madre ” fue peligroso, fue algo sucio o fuera de las normas:
  •  Historias de embarazos no deseados.
  • Historias de embarazos por violación.
  • Historias de embarazo fuera del matrimonio.
  •  Historias de muerte al momento del parto.
  • Historia de bebés discapacitados o nacidos con problemas.
  • Historias de abortos
  •  Historias de recién nacidos muertos.
Es necesario estudiar el árbol genealógico para encontrar estas historias.
El otro 20% corresponde a conflictos presentes de:
  • Violaciones constantes por parte de un familiar.
  •  Violaciones constantes por parte del marido o pareja.
  •  Proyecto Sentido de “no tener hijos” porque es “peligroso”.
  • Aviso del inconsciente de que la pareja que se tiene no es la correcta.
En mujeres diestras, padecer algún síntoma en el útero, siempre estará relacionado con problemas transgeneracionales, mezclados con falta de menstruación o menopausia temprana, que en sí mismo significa que traen la orden generacional de privarse de la copulación.
En mujeres zurdas, será un conflicto postmenopáusico con la orden generacional de “no debes llegar a la consumación del acto sexual”.
En cualquiera de ambos casos, siempre serán historias sexuales y de procreación.
¿Cuál es la emoción biológica oculta?
El útero representa la primera casa y mi primera casa.
¿Cómo libero esa emoción biológica?
Con este problema tu cuerpo te dice que verifiques si el miedo que te invade con respecto a gozar del sexo, de la procreación, del embarazo o del parto son reales o no son tuyos. Deberás si son historias de la familia, historias inyectadas por tu madre o tu presente real. Después, cualquiera que sea tu elección (hacer frente a tu miedo o dejarte influir por él) debes darte el derecho de tomarla. De todas maneras, independientemente de la decisión que tomes, no escaparás a las consecuencias. Debes darte el derecho de ser humana y no tienes que rendirle cuentas a nadie. Tu vida y tus decisiones te pertenecen. Tu cuerpo también te dice que sería preferible que esperaras más tiempo antes de actuar. Esto no quiere decir que no seas espontánea, sino que muestres más discernimiento en cuanto a la elección  del momento para actuar espontáneamente. Date el derecho de tener límites. Por otro lado, es posible que utilices la expresión: “No puedo concebirlo”, en el sentido de “No lo comprendo”. Esto podría ser suficiente para impedirte concebir en cualquier área.
  • Estoy a gusto con mis decisiones.
  • Vivo una vida sexual plena.
  • Soy capaz de concebir y de dar a luz un hijo.
  • Me amo y me acepto como soy y no necesito las opiniones de nadie.
  • Puedo decidir ser madre o no serlo y no por eso mi vida dejará de tener sentido.
Fuente: Akasha Sanación Integral

Endometriosis

 El endometrio es la capa mucosa que recubre el interior del útero. Durante la ovulación, esta capa se engrosa para recibir el óvulo fecundado y favorecer su adecuado desarrollo. Durante los ciclos menstruales que terminan sin fecundación esta capa es eliminada junto con el flujo sanguíneo de la regla.
 El desarrollo excesivo de esa mucosa y su expansión a otras zonas próximas se conoce como endometriosis. Cuando el tejido endometrial aparece en la vesícula, que representa el órgano vinculado a la organización y marcado de territorio, se trata de conflictos surgidos habitualmente en el hogar o en el trabajo. Si el tejido endometrial se desplaza hasta los ovarios es porque la mujer ha vivido o está viviendo un conflicto de pérdida, probablemente un aborto o la muerte prematura de un hijo. En estos casos suele haber memorias transgeneracionales de niños fallecidos al nacer o en la primera niñez.  Cuando la endometriosis se manifiesta en el recto siempre hay detrás situaciones que la mujer ha vivido como traición y golpe bajo por parte de su pareja.
 La endometriosis pone de manifiesto que la mujer siente que no dispone del nido o la privacidad adecuados para procrear. Puede tratarse de un hogar inadecuado, un ambiente familiar tóxico o la presencia de otras personas, como por ejemplo la familia política. Todo ello limita la capacidad y la libertad de la mujer para organizar su territorio y sentir que éste reúne las condiciones idóneas para que crezca su hijo.
 La mujer siente que no dispone del nido o la privacidad adecuados para procrear…
Más habitualmente, la endometriosis responde a memorias transgeneracionales y de Proyecto Sentido surgidas de muertes ocurridas en partos anteriores o partos que resultaron peligrosos. Puede tratarse incluso de la memoria del propio parto de la mujer que sufre endometriosis si éste implicó un sufrimiento excesivo y dolor tanto para ella como para su madre. La memoria celular de esa mujer guarda latente toda esa información que se activa y manifiesta cuando anhela ser madre; memoria que puede llegar a obstaculizar ese deseoa través de su biología para evitar la posibilidad de repetir episodios de dolor y peligro. La mujer desea tener un hijo; pero hay algo más fuerte y profundo que lo impide. Es un miedo inconsciente que bloquea su deseo.
 Cuando el endometrio crece en exceso sin desplazarse fuera del útero puedo dar lugar a la aparición de pólipos que se incrustan en la pared del útero. La presencia de estos cuerpos extraños en el útero no suele manifestar síntomas; pero sí puede provocar irregularidades en la intensidad y la periodicidad de la regla, así como metrorragias o sangrados vaginales desvinculados de la menstruación. Los pólipos endometriales son causa probable de infertilidad porque comprometen seriamente la posibilidad de quedarse embarazada y dificultan el mantenimiento de embarazos en curso. Los pólipos endometriales ponen de manifiesto la inseguridad de la mujer sobre su capacidad para llevar a cabo el embarazo. También evidencian sus dudas para comprometerse plenamente con su pareja, así como sus miedos ante la posibilidad de recibir a su hijo en un ambiente familiar o en un hogar inadecuados.
Los pólipos endometriales ponen de manifiesto la inseguridad de la mujer sobre su capacidad para llevar a cabo el embarazo. 

Nido, casa, hogar, nutrición, afecto…

El útero representa el nido, la casa, la privacidad y seguridad que anhela y necesita la madre para proporcionar el ambiente familiar ideal a su futuro hijo. Cualquier síntoma referido a esa parte de su cuerpo desvela, como hemos visto, la existencia de conflictos emocionales que la limitan en sus deseos y capacidades como generadora de vida. Conflictos que comprometen seriamente su función materna y que delatan cómo vive y siente su relación de pareja.
 La mujer que sufre cualquiera de las enfermedades vinculadas al útero debe tomar conciencia de las circunstancias de su Proyecto Sentido, de las posibles memorias transgeneracionales a las que está expuesta y, por supuesto, de esos miedos e incertidumbres que le están bloqueando. A partir de esa toma de conciencia podrá realizar los cambios necesarios en su vida para liberarse y realizarse en coherencia y plenitud.
Fuente: Jesús Casla

No hay comentarios:

Publicar un comentario